Año Nuevo, oportunidades nuevas.
enero 03, 2017
El año nuevo se torna una fecha muy especial ya
que aprovechamos para hacer borrón y cuenta de nueva. Nos aferramos a esta
fecha para tomarla como un nuevo inicio, en donde emprendemos proyectos que teníamos
olvidados o que aún no nos atrevíamos a empezar. Muchos ponen en práctica los
mitos del Año nuevo y a la media noche del 31 sacan la maleta de viaje, comen
12 uvas y visten una prenda íntima de color. Todo esto vale, todo cuenta para
empezar el año con optimismo y buenas vibras. Sin embargo, lo más importante es
tener las metas que queremos realizar bien claras y así será más fácil para poder llegar a ellas. (Recomiendo hacer
un TO DO LIST y ponerla fecha de finalización, de este modo nos organizamos
mejor y entendemos cuales son las prioridades que tenemos)
En lo personal, siempre veo el Año nuevo como
un refrescamiento para mi alma y mi mente. Varios días antes del 31 de
diciembre empiezo a pensar y recapitular que momentos del año que estoy dejando
fueron importantes, que momentos marcaron un cambio en mi vida y que momentos
quisiera guardar. Hacer un auto-examen de que cosas buenas y malas me sucedieron y que puedo aprender de ellas, esto me ayuda mucho a poder diferenciar entre las cosas
que debo seguir haciendo bien y en aquellas que debo mejorar.
Cuando haces un STOP de tu día a día, paras y
miras en tu pasado, es más fácil identificar cuales fueron tus logros y las
metas que alcanzaste en 365 días. Cuando empiezas a recordar todo lo que
viviste y el camino que recorriste, te
das cuenta que hiciste mucho más de lo que creías, que con tus comportamientos impactaste
personas y creaste cambios positivos en ellas. A veces nos sorprendemos de las cosas que
logramos hacer y que pasamos por desapercibidas. Esperamos que otros reconozcan
nuestro trabajo pero nos olvidamos de reconocernos a nosotros mismos. Queremos hacer felices a nuestro prójimo y nos
olvidamos de ser felices primero nosotros.
Si quieres empezar este nuevo año con el pie
derecho, empieza por poner en práctica todas aquellas cosas que te hacen sentir
feliz. La felicidad es contagiosa, si brindas una sonrisa al que está a tu
lado, le podrías arreglar el día sin saberlo. Practica lo que predicas, toma lo
positivo de cada situación y transforma lo negativo en lecciones para el futuro. Agarra
los errores, examínalos, estúdialos y así comprenderás como no repetirlos una y
otra vez.
No necesitas un nuevo año para hacer cambios en
tu vida, solo necesitas un nuevo día y una decisión para cambiar eso que vienes
haciendo mal y quisieras mejorar. Sigue tu instinto y escucha tu corazón para
tomar cada decisión. El fracaso es el mejor maestro, nunca olvidemos que
siempre te puedes volver a levantar y comenzar una vez más. Nunca es tarde para
empezar nuevos retos. Vive la vida a su máximo color, recuerda que solo se vive
una vez.
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